Actualización del PCAI Ictus

El objetivo principal es conseguir mejorar la calidad de la atención sanitaria que reciben los pacientes que han sufrido un ictus.

PCAI Ictus
2017-04-26 13:51:00.0 Imprimir

Este PCAI (Programa Clave de Atención Interdisciplinar) persigue establecer unas directrices de actuación homogénea en el proceso diagnóstico y el abordaje integral del Ictus siguiendo criterios de calidad científico-técnica, con una optimización de los recursos sanitarios y sociales encaminados a lograr la satisfacción del paciente.

 

Esta es la última versión (febrero de 2013 que se modificará si se produce conocimiento científico relevante, fundamentalmente en aspectos o preguntas concretas en que las recomendaciones se modifiquen sustancialmente).

 

 

 

 

Recomendaciones clave 

  • La hipertensión arterial y la hipercolesterolemia deben tratarse en todos los sujetos, independientemente de su edad, severidad o riesgo cardiovascular global, para disminuir el riesgo de ictus.
  • Los pacientes con fibrilación auricular (crónica o paroxística) que cumplan los criterios de este PCAI deben recibir anticoagulación oral buscando un INR de 2-3.
  • Se recomienda la realización de campañas de concienciación pública que incrementen el conocimiento por parte de la población de los signos de alarma del ictus, especialmente entre aquellos sujetos de más alto riesgo.
  • Ante todo paciente con sospecha de un ictus agudo, en caso de que esté indicado, se activará el Código ictus y se contactará con el 112.
  • El objetivo del Código ictus es que el paciente pueda recibir el tratamiento fibrinolítico  antes de las cuatro horas y media desde el inicio de los síntomas y teniendo en cuenta que será necesaria la realización de determinadas pruebas complementarias (TAC, analítica, valoración neurológica) por lo que se estima necesaria la llegada al hospital en las dos primeras horas desde el inicio de los síntomas.
  • Los pacientes con AIT deben ser atendidos en un entorno hospitalario que permita completar los estudios e iniciar el tratamiento etiológico en 48 horas.
  • Los pacientes con ictus deben ser tratados en Unidades de Ictus con personal de enfermería especializado y atención continuada las 24 horas y protocolizada, con especial hincapié:
    • Atendiendo a la prevención: de aspiración, de úlceras de presión, de caídas, de infecciones del tracto respiratorio, de infecciones del tracto urinario, e infecciones por venoclisis.

    •  Atendiendo a las complicaciones: progresión-recurrencia ictus, crisis epilépticas, hipertensión intracraneal, deshidratación y alteraciones electrolíticas, alteración función vascular, neumonía por aspiración, alteraciones del ritmo respiratorio y acúmulo de secreciones, tromboembolismo pulmonar, complicaciones hemorrágicas, hipertensión arterial, hiperglucemia, hipertermia, dolor. Como paso intermedio a su creación se pueden establecer Equipos de Ictus que aseguren una atención continuada de calidad.

  • El equipo encargado de la rehabilitación debería estar formado por personal experto multidisciplinar: médicos, neuropsicólogos, enfermeras, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, logopedas, trabajadores sociales,...Sus miembros deberán seguir programas específicos de formación continuada. Los pacientes y cuidadores deberían tener también una implicación activa y precoz en el proceso de rehabilitación.
  • La movilización de los pacientes que han sufrido un ictus debe realizarse lo antes posible desde la instauración de la clínica, iniciándose la rehabilitación durante la primera semana de ingreso.
  • El paciente al alta debe recibir un informe clínico que contenga información para permitir la atención continuada en los diferentes niveles asistenciales. Debe contener al menos el diagnóstico principal y los diagnósticos secundarios, los procedimientos realizados, los tratamientos médico y rehabilitador, las medidas preventivas y el plan de revisiones que deben seguirse. Se recomienda que proporcione información acerca del nivel de dependencia del paciente y debe ser legible por el paciente.
  • Debe utilizarse el tratamiento antiagregante como preventivo de la recurrencia del ictus aterotrombótico y de otros eventos vasculares. La opción terapéutica debe escogerse en función de las características del paciente.
  • La endarterectomía carotídea está indicada en pacientes con estenosis sintomática del 70–99% sin déficit severos y con eventos isquémicos recientes y siempre que el servicio quirúrgico acredite una tasa de complicaciones perioperatorias inferior al 6%.
  • Se considera necesario que un Trabajador Social se integre en el equipo sanitario de ictus para realizar las valoraciones y seguimiento del paciente/familia desde su ingreso en el hospital, elaborando al alta el informe social correspondiente y derivando al paciente al Trabajador Social de Atención Primaria. Asimismo, prestará apoyo psicosocial cuando el estado de salud del paciente genere un cambio importante en el desarrollo de su vida diaria.

 

Editado por última vez el: 2020-03-06 10:16:35.988 Imprimir